Hoy no hay poesía, no hay prosa, sólo una sencilla ilustración en memoria de mi pluma, la qué he perdido. Tengo rabia conmigo, tontamente la dejé en no sé donde y ya no la encontré. No creo ser obsesivo, pero aquella pluma que me acompañó por tres años era un objeto especial, con cada trazo dado desarrollé una profunda conexión mística. La extraño.
Espero de todo corazón que quien la haya tomado o encontrado, la admire y use como la poderosa herramienta de expresión que es; espero a su vez que mi vieja pluma se encuentre proporcionando a un nuevo dueño toda la alegría y libertad que durante tres años me suministró, pidiéndome a cambio tan sólo una periódica recarga de tinta.
farewell my friend, farewell...
La verdad no puedo evitar leer esto aguantando un poco la risa. Pero no me río de tí (bueno, un poco)sino de la carga sentimental que uno le pone a las cosas. Justo en estos días que mi cámara se arregló después de haberla creído dañada para siempre, la abracé, le dí besos y le dije "te prometo que no volverá a pasar..." jajaja.
ResponderBorrarTambién me entristece mucho cuando algo se me pierde. Es como si se fuera un pedacito de uno, así que mis más sentidas condolencias por tú pérdida.
La pluma era una herramienta, pero la expresión la pones tú, me ha encantado tu relato, como lo escribes, y supongo que escribas con pluma, boli, lápiz o barra de labios, seguirán siendo relatos admirables. Sigue así.
ResponderBorrarTE he conocido a través del grupo de facebook y has ganado una lectora.
jajaj que lindura, bueno fue una buena pluma, se le recordará con cariño.
ResponderBorrarSe le recuerda con cariño. después de mucho tiempo encontré una nueva pluma y con ella tengo una nueva relación.
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