▬ Lo que tienes en la mano hijo mío es una llave. Y las llaves, como sabes, abren o cierran puertas. Diligentes hemos escondido secretos tras la puerta que estas apunto de abrir, y en tu mano sostienes la posibilidad de enfrentar y develar los misterios y monstruos que yacen encerrados en el lugar al que pretendes ingresar.
[…]
▬ Si, te entiendo. Me alegra escucharte decir eso, pero debes saber que tras esa humilde puerta se extiende un mundo que sólo puede ser descrito como un laberinto. Allí no encontraras limitantes, no habrá muros u obstáculos, al entrar enfrentarás a tu inconsciente; el tiempo, el espacio y la materia serán puestos a su servicio, todo lo bueno o malo que lleves contigo será usado para probar la materia de la que estas hecho. Mucho soportarás para sacar de ti al héroe que deseas, y si no lo hay simplemente serás consumido. Esa es la ley.
[…]
▬ Tranquilo, contigo llevarás este libro. Es la única guía que existe para cruzar la vasta tierra tras la puerta. […] Si, todas las páginas de la guía están en blanco, pero ello no significa que la ayuda que deseas no este allí, es parte de tu viaje descubrir los secretos del libro, así como los que aguardan tras la puerta. No puedo decirte más, es hora de que des el paso…
-Altais-
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